miércoles, 1 de julio de 2015

Escuelas diferentes


Nuestro mundo ha cambiado enormemente en los últimos años, algo que se ve reflejado en diferentes áreas como la tecnología, la medicina o la comunicación, sin embargo la educación sigue un ritmo diferente. En muchos centros educativos sigue predominando la misma metodología de enseñanza-aprendizaje de hace años, anclada en métodos de exposición pasiva y evaluación cuantitativa. Sin embargo, poco a poco estamos experimentando grandes cambios, que van transformando el mundo educativo con pedagogías colaborativas, cooperativas, investigadoras, motivadoras, integradoras e innovadoras, centradas en el alumno como el elemento más importante, pero teniendo en cuenta a toda la comunidad educativa y el entorno, adaptándose a sus características concretas y necesidades más inmediatas. Algunos centros incluso, en un acto de gran valentía, dan un giro de 180º a la concepción de la enseñanza, demostrando que lo que para otros son ideas utópicas, para ellos son realidades que funcionan y que además conducen al éxito. Estoy hablando de centros como O Pelouro (Pontevedra), Amara Berri (País Vasco), Padre Piquer (Madrid), o Escola Sadako (Barcelona), reconocidos recientemente como "Escuelas Changemakers" por la red internacional Ashoka, como premio a sus innovadoras metodologías. Todos ellos tienen en común dotar al alumno de un mayor protagonismo y decisión en su proceso de aprendizaje, además de adaptarse a la realidad y circunstancias individuales. Para conseguirlo se sirven de talleres, aulas de medios de comunicación, aulas de enlace, o asignaturas de educación emocional y filosofía desde los tres años, entre muchas otras iniciativas. 

A estos cuatro centros podemos sumar los casi 500 recogidos por Ludus, con un amplio repertorio de pedagogías alternativas en nuestro país. Un ejemplo de ello es el proyecto de Madre de día 'El ritmo de las mariposas', una bonita propuesta llevada a cabo por Eva Melchor, pedagoga con quien coincidí en la carrera, en la que predomina el respeto por la etapa de educación infantil y por los ritmos individuales de crecimiento de los más pequeños. Una alternativa a las guarderías, con educadores profesionales formados en psicología sistémica, pedagogía Waldorf y método Montessori, realizada en hogares adaptados, en grupos reducidos y en un ambiente familiar. 

Éstos son sólo algunos de los muchos ejemplos que podemos encontrar en España y otros países, los que nos ayudan a concebir que otra realidad educativa es posible y la necesidad del cambio y adaptación continuada a la realidad en la que vivimos, porque como bien dice Jordi Musons, director de Escola Sadako: "Dentro de muy poco todos vamos a ser escuelas diferentes".